Mi gato no quiere comer . ¿Y ahora? Al igual que nosotros, los felinos pueden perder el apetito por diversas razones.
La causa puede ser muy simple o deberse a una enfermedad más grave pero independientemente de la causa, el problema no puede ser ignorado porque la falta de nutrientes puede afectar la salud y el bienestar del animal, generando incluso otras enfermedades.
Enumeramos las causas que hacen que el gato deje de comer y qué hacer para solucionar el problema.
- No le gusta su comida: los gatos pueden dejar de comer si su nuevo alimento no les gusta o, simplemente, si se han aburrido de su comida habitual. A veces basta con cambiar su menú u ofrecerle un plato más suculento como las latitas para que recuperen su apetito.
- Disposición del comedero: en ocasiones, la causa es tan sencilla como que no le gusta donde está situado su cuenco. Puede que lo hayas colocado cerca de su bandeja higiénica, algo que no les agrada, o en algún lugar con mucho ruido.
- Está estresado: los gatos son muy sensibles a los cambios en el entorno y se estresan fácilmente. Una situación estresante como la llegada de otro animal o persona, así como cualquier modificación en la casa o en su rutina, pueden ser el motivo de que rechacen la comida.
- Bolas de pelo en el estómago: si tu gato tiene mucho pelo o no le cepillas a menudo, puede acumularse el pelo en su aparato digestivo y causar obstrucciones. Este trastorno, además de causarle malestar, arcadas y vómitos, también puede hacer que el gato no coma.
- Está enfermo: cuando los gatos se encuentran mal, dejan de comer. A la vez, pueden aparecer otros síntomas como decaimiento, vómitos, dolor o fiebre. Las enfermedades pueden ser diversas y pueden estar relacionadas con el aparato digestivo, urinario o con los órganos vitales.
- No puede comer: también es posible que tu gato tenga hambre y ganas de comer pero haya algo que se lo impida. Puede tener dolor en la boca, en la faringe o incluso en la cavidad nasal.
- Intoxicación o envenenamiento: si tu gato ha comido algo que no debía o que no puede digerir y le hace daño, también dejará de comer. Si tienes sospechas de una posible intoxicación, llévale lo más rápido posible al veterinario.
¿Qué debo hacer?
Si tu gato ha dejado de comer croquetas , el problema puede ser una alimentación inadecuada. Muchas veces algún familiar o amigo quiere complacer a nuestra mascota con un alimento más apetecible y termina incomodándola. La mascota empieza a rechazar el alimento actual, porque sabe que obtendrá algo mejor.
Agregar otras cosas a la comida para gatos es otra opción equivocada. Los gatos son selectivos y exigentes y pueden elegir qué comida quieren comer.
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- Natural, sin preservantes, colorantes, ni sabores artificiales.
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